Turismo e inversión extranjera, juntos y revueltos
JORDI PANIAGUA. 06/02/2013
http://www.valenciaplaza.com/ver/75931/-turismo-e-inversion-extranjera--juntos-y-revueltos-.html
VALENCIA. El president del Consell aprovechó la
Feria Internacional de Turismo, FITUR, para anunciar un novedoso giro en
la política de promoción de inversión extranjera. Tras la liquidación
de la agencia de inversión extranjera (VCI) y el cierre de las
delegaciones permanentes del IVEX, se ha optado por crear una delegación comercial itinerante "que viajará a países de todo el mundo",
para atraer conjuntamente inversiones y turistas a la Comunitat. Al
integrarse las conselleries de Turismo y Economía, se han aprovechado
"sinergias" operativas para alinear la promoción del ocio y la
económica.
Los economistas llevamos algún tiempo observado un patrón similar en los flujos económicos de un país de origen a un país de destino. Comercio, inmigración, turismo e inversión extranjera obedecen a unos determinantes similares. A nivel empírico, los países de origen de turistas, inversión, comercio e inmigrantes son similares y provienen de nuestro entorno físico y cultural más cercano (Inglaterra, Francia, Sudamérica).
Los países más lejanos o diferentes no se sienten tan atraídos ni por nuestras playas ni por nuestras empresas. Además, estas magnitudes siguen el ciclo del PIB de la díada de países inmersos en el intercambio económico. En 1962 Jan Tinberger, premio Nobel de economía, nombró esta relación empírica como la ecuación de gravedad, por analogía con la célebre ley de gravitación universal de Newton.
Esta similitud no implica una ventaja a la hora de aplicar el mismo tipo de políticas y actuaciones en relación con estos flujos económicos. Por ejemplo en 2007, Tang, Selvanathan y Selvanathan encontraron una relación causal entre inversión extranjera y turismo en China. Sin embargo, el gobierno chino sigue diferenciando exquisitamente sus objetivos turísticos de los industriales.
Tampoco conozco ningún caso en el que se alineen la política de migración y turismo. De hecho suelen estar reñidas al perseguir objetivos parcialmente incompatibles. La mayoría de los países también separan la política de promoción de exportaciones de la de inversión, ya que no es lo mismo ayudar a vender vino de DO Requena en Francia que invitar a una bodega francesa a elaborar sus caldos en Requena.
Tendría sentido unir las políticas de turismo e inversión en regiones cuando la inversión extranjera se concentra precisamente en el sector turístico. De hecho, tan solo Lesoto, las Islas Salomón, Cabo Verde (y ahora la Comunidad Valenciana) tienen alineadas sus políticas de promoción turística e inversión. Durante el 2011, la inversión extranjera en actividades turísticas representó menos del 1% del total en la Comunitat. La nueva política del Consell, es un hecho insólito para una región con una implantación industrial y un amplio espectro sectorial en materia de inversión extranjera.
El turista busca el sol y la playa, el inversor seguridad jurídica y retorno en su inversión; el emigrante un trabajo y una vida mejor; el exportador una oportunidad y una demanda fuerte. Será un verdadero reto para la nueva delegación ambulante conseguir que el inversor extranjero no se confunda y acabe la fiesta en Benidorm.
Los economistas llevamos algún tiempo observado un patrón similar en los flujos económicos de un país de origen a un país de destino. Comercio, inmigración, turismo e inversión extranjera obedecen a unos determinantes similares. A nivel empírico, los países de origen de turistas, inversión, comercio e inmigrantes son similares y provienen de nuestro entorno físico y cultural más cercano (Inglaterra, Francia, Sudamérica).
Los países más lejanos o diferentes no se sienten tan atraídos ni por nuestras playas ni por nuestras empresas. Además, estas magnitudes siguen el ciclo del PIB de la díada de países inmersos en el intercambio económico. En 1962 Jan Tinberger, premio Nobel de economía, nombró esta relación empírica como la ecuación de gravedad, por analogía con la célebre ley de gravitación universal de Newton.
Esta similitud no implica una ventaja a la hora de aplicar el mismo tipo de políticas y actuaciones en relación con estos flujos económicos. Por ejemplo en 2007, Tang, Selvanathan y Selvanathan encontraron una relación causal entre inversión extranjera y turismo en China. Sin embargo, el gobierno chino sigue diferenciando exquisitamente sus objetivos turísticos de los industriales.
Tampoco conozco ningún caso en el que se alineen la política de migración y turismo. De hecho suelen estar reñidas al perseguir objetivos parcialmente incompatibles. La mayoría de los países también separan la política de promoción de exportaciones de la de inversión, ya que no es lo mismo ayudar a vender vino de DO Requena en Francia que invitar a una bodega francesa a elaborar sus caldos en Requena.
Tendría sentido unir las políticas de turismo e inversión en regiones cuando la inversión extranjera se concentra precisamente en el sector turístico. De hecho, tan solo Lesoto, las Islas Salomón, Cabo Verde (y ahora la Comunidad Valenciana) tienen alineadas sus políticas de promoción turística e inversión. Durante el 2011, la inversión extranjera en actividades turísticas representó menos del 1% del total en la Comunitat. La nueva política del Consell, es un hecho insólito para una región con una implantación industrial y un amplio espectro sectorial en materia de inversión extranjera.
El turista busca el sol y la playa, el inversor seguridad jurídica y retorno en su inversión; el emigrante un trabajo y una vida mejor; el exportador una oportunidad y una demanda fuerte. Será un verdadero reto para la nueva delegación ambulante conseguir que el inversor extranjero no se confunda y acabe la fiesta en Benidorm.